24 de Febrero de 1946


El 24 de febrero de l946 se realizaron elecciones generales en la República Argentina.


Se enfrentaron dos modelos claramente definidos en la historia del país.
Por un lado, la coalición liberal. En torno a la denominada Unión Democrática confluyen la Unión Cívica Radical, conservadores, socialistas y el Partido Comunista, contando con el apoyo económico de diversas fuerzas empresarias vinculadas a la oligarquía terrateniente y la unanimidad de la prensa Nacional.
Fue su ideólogo, el Embajador de los Estados Unidos en Argentina, Spruille Braden, con las candidaturas de José Tamborini y Enrique Mosca.
Enfrente, la fórmula Juan Domingo Perón-Jazmín Hortensio Quijano, sostenida por el Partido Laborista fundado por Cipriano Reyes y el coronel Mercante, un desprendimiento de la UCR (Junta Renovadora) de donde proviene Quijano y el Partido Independiente que aporta hombres como Héctor J. Cámpora y Alberto Tesaire.
Cuentan con el apoyo de los trabajadores organizados, auténtica fuerza de la nacionalidad que expresaban a través de Perón, la posibilidad de construir una Nación socialmente justa, económicamente libre y políticamente soberana.
La fórmula Perón-Quijano obtuvo 1.479.517 votos y la de Tamborini-Mosca 1.220.822; no existía el voto femenino. Perón se alzaba con el 55% del total de los votos. El Partido Laborista conseguía 100 bancas en la Cámara de Diputados, la UCR 44, los conservadores, 2.
En el Senado Nacional, los partidarios de Perón tenían 26 bancas y los independientes 2
Los peronistas ganaron todas las gobernaciones provinciales.
Por primera vez en muchos años, el país vota sin fraude. El elogio del acto cívico es general. Hasta el New York Time diría: “El coronel Perón sube al poder con el mayor número de votos electorales que cualquier otro argentino de años recientes. Tendrá gran mayoría en el Congreso. Sus partidarios ganaron las gobernaciones de las 14 provincias. Sea o no de nuestro agrado y de aproximadamente el 45% de los votantes argentinos, el coronel Perón ha sido elegido por el término de seis años y aparentemente (sic) por el voto libre y honesto del pueblo” (¡!).
A sesenta años de aquel hecho trascendente en la vida política e institucional de la República, podríamos reafirmar que el mismo fue la respuesta política a las condiciones sociales, económicas y culturales imperantes en la Nación; dando inicio a una etapa insuperable en realizaciones y crecimiento de la Patria, como así también, a la felicidad de su pueblo.
Por entonces, Perón les diría a los muchachos: “Lo nuestro ya ha entrado en el Pueblo. Sigan ustedes con el trabajo”.
AUDIO: JURA PERON
Carlos H. Hadad